No soporto la gente que habla por los codos. A ver, que si hay que aguantarles soy la primera en poner la parabólica, sentarme, poner cara de «me interesa mucho lo que estás contando» y asentir con la cabeza cada vez que la cotorra de turno te suelta el chaparrón del siglo. Dime sosaina, pero no soy de ese grupo de personas que habla por los descosidos y le cuenta su vida al primero que se le presenta por delante.

Aquí la menda lerenda es más de ir al grano. También es verdad que pecadora de mí, algunas veces lanzo lo primero que se me pasa por la cabeza , sin pensarlo más de 10 suspiros y, entonces es cuando se lía el ovillo. Pero el caso es que siempre he pensado que las cosas cuanto más sintetizadas, mejor, que en esta vida no hemos venido a perder el tiempo.

Por eso, Twitter siempre me ha parecido la red social perfecta. Expresar en pocas palabras o, lo que viene siendo lo mismo, 140 caracteres lo que uno tiene que decir. Ni más ni menos. Qué queréis que os diga, me daba gustilirrín tener que estrujarme la cabeza para escribir tweets que no superaran los 100 caracteres . Y sí, sigo «me daba» porque los jefesitos de Twitter han decidido que se han acabado las muecas y caras extrañas apretando cada músculo de la cara cada vez que uno escribía un Tweet.

La nueva era de Twitter nos permite largar todo aquello que se nos pase por la cogotera, saborear el gusto de poder dar la chapa a tutti plen. Ahora ni los links ni las fotos, ni los gifs cuentan como caracteres. ¡Qué desmadre, oiga! Y claro, ya hemos sufrido los primeros ataques de esos que tienen que verbalizar hasta cuando piensan y el timeline de Twitter ahora ya parece uno de esos pergaminos sin fin.

No te me asustes que no todo es malo en esta vida. Sí hay 3 razones por las que Twitter ha dado en el clavo con esta actualización. ¡Aquí van!

  1. Más vale que sobre que no que falte. Esta frase es muy, pero que muy de madres, pero sí, siempre es mejor usar el comodín de + caracteres cuando se escriben más de 10 tweets al día. Que pasadas unas cuantas horas, a los mortales, la esponjita que tenemos ahí arriba no hay quien la escurra.
  2. Lo bueno si es breve mejor. De eso no me cabe ninguna duda pero, qué bien poder decir mucho en poco espacio y con la posibilidad de añadir una foto o un gif. No nos engañemos, los tweets con más engagement son los que incluyen una foto, si es atractiva mejor, o un gif.
  3. Cuando uno busca interactuar con sus seguidores y generar engagement con ellos tiene que responder, comentar, retuittear y hacerlo sin la limitación de caracteres será un plus.

Lo veis, no todo tenía que ser malo. Os dejo con el tweet con el que Twitter anunció el cambio.

Espero que os haya gustado el post y si me queréis «suscrbirse», hombre, que cada semana os espero con un nuevo post sobre redes sociales y algo más.

¡Feliz semana! Nos vemos el próximo miércoles 🙂