mode pause off

Una boda, una mudanza, un embarazo, un parto, un post parto y un confinamiento de ya no sé cuantas semanas después, ya va siendo hora de que vuelva a tomar el control de este blog. Habré escrito este post unas… ¿Dos cientas veces? Y quizás me quede corta. De hecho, esto que estás leyendo tenía que haberlo publicado hace unas cuantas semanas, justo con mi reincorporación al trabajo, pero el coronavirus llegó y lo puso todo patas arriba.

Pero ahora ya sí toca coger las riendas del teclado, sacar el polvo de entre los post que hay en borradores y dejarme caer por aquí de forma más habitual.

Por si te has perdido alguna cosa, te cuento que 2018 fue un año para recordar. Después de casi tres años en el Equipo Wonder, dejé atrás mi trabajo en Mr. Wonderful como Community Manager y me lancé a la aventura de empezar un trabajo nuevo en otra empresa, a tan solo 2 meses de casarme. ¡Toma ya! Una aventura que me llevó a Nestlé, en el Digital Acceleration Team.

En mayo, me casé. Viajamos a la Costa Oeste de EEUU cumpliendo uno de nuestros mayores sueños y, por si fuera poco, en septiembre descubrimos la Bella Italia con un Fiat 500 de color blanco con el que nos multaron hasta 5 veces y no por exceso de velocidad… Otro día con más calma, te lo cuento…

Y en diciembre de 2018, llegó la mejor de todas las noticias. Estábamos esperando un bebé 🙂 Nueve meses más tarde llegó nuestra primera hija y ya han pasado ocho meses desde que somos una familia de tres. Ocho meses con sus noches en vela, sus largas pero dulces horas de teta y un máster en cambiar pañales y poner baberos (entre otros, los que necesitamos nosotros porque se nos cae la baba con ella).

Y ahora un virus nos ha dejado a todos encerrados en casa durante ya no sé cuantas semanas. Esto nos ha cambiado a todos. La forma en la que nos comunicamos, nuestras rutinas, la manera con la que nos enfrentamos a nuestros miedos… De ahí que me avanzara al retorno al blog y escribiera este post sobre cómo comunicar en tiempos de crisis y este otro sobre Cómo te ayudan las redes sociales a conectar con tu público en una crisis.

Y precisamente, si hay algo de lo que me estoy dando cuenta estas últimas semanas es de que el tiempo pasa que se las pela y que este virus ha venido para avisarnos de que algo estábamos haciendo mal. Que hay que parar y ver las cosas desde otra perspectiva. Y que hay que exprimir cada minuto al máximo y, eso es, precisamente, lo que hice en mis últimas semanas de baja maternal: aprovechar para formarme y retomar este blog preparando contenido que pueda aportar valor.

Espero con mucha ilusión volver a escribir sobre redes sociales, en especial Instagram, por la que siento especial debilidad, de ahí que me haya lanzado a hacer el curso Insta&Roll de Susana Torralbo, para refrescar y aprender cosas nuevas sobre esta red social y que me haya animado a inscribirme en el curso Superstar de Jackie Rueda. Tengo contenido sobre estrategia digital y community management que está deseando salir del cajón de borradores para ser publicado. Entre otros proyectos estoy renovando la web y tengo pendiente una sesión de fotos con mis queridas Lirolacusso,  que justo habíamos agendado cuando nos confinaron. ¡A tope de power!

Poco a poco, el blog irá volviendo a la normalidad, o al menos esa es mi intención, así que espero que sigamos leyéndonos.

¡Hasta pronto y un grandísimo abrazo!